Hoy los trabajadores neuquinos le dijimos no a la destrucción medioambiental y a la ganancia de dinero a costa de la salud del pueblo.
Los políticos de la legislatura decidieron sesionar igual pese a la presión fuera del recinto. La policía provincial protagonizó un acto de represión descarado, serviles siempre al patrón que les da de comer, que es el gobierno provincial. De todas maneras una parte de los trabajadores encaró la resistencia. Los políticos profesionales, de
todas las organizaciones que se llaman “de oposición” mostraron su lado flojo (el de siempre) y se dedicaron a hablar de política en altavoces mientras la sed capitalista dejaba un compañero herido de gravedad por una bala de plomo y otros tantos lesionados.
El pacto Y.P.F.–Chevron no es un negocio yanqui, es un negocio local. El gobierno argentino busca capitales extranjeros para lo que quiere hacer de todas maneras (porque Y.P.F. tiene que responder a sus socios) bajo la excusa de la mentirosa “soberanía hidrocarburífera”.
Compañeros, la defensa de los recursos naturales y de la vida del pueblo no se debaten en las instituciones burguesas, cualquier elemento que ostente un poco de poder tiene que sentir vergüenza de sentarse mañana y siempre con los representantes del poder capitalista regional-global. Los autoproclamados “diputados obreros” son títeres de
una farsa demócrata que nos invita a charlar en buenos términos con los enemigos de los trabajadores.
La explotación hidrocarburífera es la peste del pueblo.
Saludamos la resistencia de los trabajadores neuquinos en la jornada de hoy.
SOCIEDAD DE RESISTENCIA DE
OFICIOS VARIOS DE NEUQUEN
(F.O.R.A.-A.I.T)