María José eligió el rincón de la Literatura, pidió que leyera un cuento y seleccionó La Bella Durmiente. Comienzo a leer, me interrumpe y lo cambia por La Cenicienta.
Retomo mi lectura y lo cambia por Blanca Nieves. Le pregunto qué sucede y ella responde: – Las princesas siempre deben casarse con príncipes y ser felices, perdiendo siempre algo, como Cenicienta, su zapato; La Bella Durmiente, el presente y Blanca Nieves, su castillo. – Siempre deben depender de un hombre – le contesto – Son historias mágicas, fantásticas. Ella agrega: – No quiero ser princesa. Jugaré en el rincón de la Construcción.