Tengo una posición ética pública desde hace mas de 30 años en contra de la utilización del invento del SAP, en contra de las vinculaciones forzadas, creo y lo digo públicamente que los varones abusadores no son padres aunque lo sean biológicamente y que los violentos deben ser alejados de sus hij@s por el bien de ellos.
Hay Jueces y Juezas que dan vergüenza en los Tribunales de Familia. Empezaremos a denunciar la mala praxis, el impedimento de contacto de madres protectoras, la reversión de tenencia a favor de padres denunciados, con pericias que no son tenidas en cuenta.
Las denuncias falsas son un invento de estos grupos que delinquen, secuestran, golpean y abusan. Y luego se llaman a sí mismos victimas.
La impunidad deja solas a las víctimas, eso quieren, pero no lo van a conseguir. Hay una niña muriendo en un hospital. Fue alejada de su madre, entregada al abusador. Hay una madre con cáncer en el sur. Su hija fue entregada al abusador y la jueza dicto una cautelar que nos impide nombrarla. Tenemos muchas juezas Burumbububn…hay mucha ciudadanía ética. Y un periodismo que no se va a callar
Lamentable la postura de la Lic. Hendel, negándose al debate democrático. Critica el Síndrome de Alienación Parental pero no comprende de qué se trata. El documental demuestra con cámara oculta su existencia. La violencia de género no se limita a la violencia contra la mujer (en cuyo caso así se llamaría). Condenar sin pruebas ni derecho de defensa mediante cautelares eternas viola la garantía de debido proceso constitucional. Respaldar por prejuicio a la mujer es dañar irremisiblemente los derechos del hijo a tener contacto con ambos padres. Existen las falsas denuncias precisamente porque la Justicia es tuerta. La postura de Hendel repugna a la ecuanimidad que la ética profesional le impone. El ataque a la libertad de prensa que promueve es igualmente inconstitucional. Es evidente que fue entrevistada con consentimiento, pues en ningún momento se niega. Si no es capaz de sostener sus propias opiniones, entonces deberá ser capaz de cambiarlas.-