Si no quiere…

Si no quiere ver,
no le enciendas la luz,
dañarás sus ojos.

Si no quiere escuchar,
no levantes la voz,
lastimarás su conciencia.

Si no quiere caminar,
no proporciones apoyo,
sangrarán sus pasos.

Su despertar no es tuyo,
es exclusivamente suyo.
Si en algún momento hiciste
de su dolor tu dolor, suelta,
no te pertenece.

Sé amorosamente egoísta,
silenciosamente paciente,
amigablemente distante.

No te pierdas en ello.
Re-encuéntrate y alégrate,
porque tú sigues siendo tú.

Cristina Villalobos

 

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